⸺Hola buenas tardes, soy la hermana María Jesús Religiosa de la Congregación del Buen Pastor. Ingresé a la Congregación un 19 de marzo de 1978 y ya ustedes verán que hace ratito. Estoy muy feliz de ser parte de esta Iglesia y de seguir al señor que es lo más grande en conocimiento que pude experimentar en mi vida. Desde niña, sobre todo me inculcaron mis padres el amor a la virgen. Veía a mi madre cuando trabajaba y realizaba sus cosas y quehaceres dentro de la casa, ella siempre movía los labios. Lo cuento porque yo era chiquita y le preguntaba: ⸺mamá ¿por qué mueve los labios?, y ella me decía: ⸺estoy rezándole a la virgen hija. Entonces le decía: ⸺enséñame esas oraciones a la virgen y era la “salve”, Dios te salve reina y madre. Desde pequeña supe experimentar el amor a la santísima virgen. Años después mi madre me inscribió en la Primera Comunión, luego la Confirmación y a continuación el año siguiente ingresé a un grupo de Legionarias de María Juvenil. Y así fui creciendo durante varios años. Después como a los 14-15 años formamos una comunidad de jóvenes en la parroquia. Fui experimentando desde niña el amor por la santísima virgen, además he tenido muchas revelaciones, sueños, encuentros con ella. Y siento que desde los 8 años siento amor por la virgen. A los 8 aprendí a rezar el rosario e incluso mis vecinos en este mes de la virgen del Carmen me pedían que les fuera a rezar el rosario a sus casas y esa experiencia para mi fue muy hermosa porque me sentía como misionera, peregrina, podía aportar algo a esas familias, me sentía muy feliz.
En la vida religiosa conocí a las Hermanas del Buen Pastor. Porque sentía algo en la canción del Buen Pastor donde me llama y me invita a experimentar estos verdes prados de su amor, ⸺él nunca nos faltará, el señor es mi pastor nada me falta. Sabía que existían religiosas del Buen Pastor por un trabajo apostólico específico y siempre las miraba como desde lejos. Siempre había dos o tres que participaban frecuentemente con otros grupos en la parroquia. Pero yo también tenía guía en mi grupo juvenil. Una religiosa, la Hermana Eloisa Mans de las hijas de Jesús, formaba parte de una fundación de origen canadiense. Ellas nos acompañaron durante 10 años que estuvimos viviendo en esa comunidad juvenil de la parroquia, éramos alrededor de 15 a 20 jóvenes. Así transcurrió mi vida.
Al conocer a las Religiosas del Buen Pastor después de varias otras congregaciones también contemplativas, la sacramentina y otras religiosas que existían en la ciudad de Chillan. Fui conociendo y participando en los encuentros vocacionales y ahí pude conocer el carisma, la belleza que cada congregación aporta a la iglesia como este jardín en el cual embellecen la misión de Jesús. Eso lo encontraba hermoso, encontré mi lugar en la Congregación del Buen Pastor, aquí estoy cuarenta y un años gracias a dios y guiada por la santísima virgen.
Ahora me encuentro en la ciudad de San Felipe acompañando y siendo integrante de una comunidad en la que rezamos de lunes a viernes a la santísima Virgen de Lourdes en su gruta. Rezamos el santo rosario por todas las necesidades del mundo, por la salud e intenciones del santo padre y por todas las personas que necesitan de nuestro cariño de nuestra oración, para que experimenten el amor de dios y de su madre santísima que nosotros como hijos suyos nunca nos va a dejar y nos va a llevar siempre al corazón de Jesús y de su hijo amado, porque el corazón de María y el corazón de Jesús es uno solo. Experimentamos en ellos el amor grande, misericordioso de dios padre que él nos acompañe y nos acoge con su ternura, con su misericordia, con su compasión y también su perdón, porque, igual somos pecadores, nunca estamos exentas de nuestras faltas a la fidelidad de dios.
Recuerdo las revelaciones… una de dos que tuve fue cuando estaba en una casona grandota, con pilares grandes, iba bajando una escalinata cuando en la parte para llegar al primer piso en un espacio de descanso había una imagen de la virgen, sentí que ella me hablo y me decía que yo no era para el mundo. Y no entendía esas palabras, la miré, estuve un rato contemplándola y bajé. Después recuerdo muy bien hasta estos momentos en el cual creo que esa fue una de las invitaciones que el señor me dio a través de su madre al invitarme a la vida consagrada, a la vida religiosa. La otra vez, fue en un momento de mucha dificultad, siempre en la vida del ser humano hay alegrías y tristezas. Estaba con mucha pena y cerrando mis ojos, estando despierta aun, veía a la santísima virgen que se acercaba, sentí su consuelo, su compañía. En ese momento deduje que no tenia que quedarme en esa tristeza, sino tenía que salir de ese estado, porque, el amor de su hijo y el amor de ella eran mucho mas grande, el amor del padre y la fuerza, la plenitud del espíritu santo.
Tu eres cristiano desde el momento del Bautismo, eres hijo hija de dios, por lo tanto, eres un hijo amado, predilecto de dios y del corazón del padre, del amor del hijo y la plenitud del espíritu santo, que nos hace ser sacerdotes, reyes, profetas a través del bautismo. Entonces no tenemos por qué temer que dios nuestro padre nos va a dejar solos o solas, si no que su madre siempre va a estar con nosotros consolándonos. Porque ella nos asumió, asumió la maternidad en el momento de la cruz. Cuando le dice a Juan: ⸺Hijo ahí tienes a tu madre, de ese momento ella nos abraza como hijos hijas suyas a través del mundo entero. Es una madre espiritual que guía, que consuela, que acurruca y nos da la fuerza para poder ser fiel al seguimiento de Jesús, o ser un buen cristiano, una buena cristiana, un buen hijo, un buen profesional, una buena persona, un buen esposo, un buen padre. No tenemos porque sentirnos solos, sentirnos huérfanos, confiemos en la fuerza espiritual del espíritu santo. No tenemos por qué temer solamente confiar plenamente en Jesús nuestro amigo, nuestro compañero de ruta que se está ofreciendo día a día en la hostia, en la Eucaristía. Cada vez que celebramos la Eucaristía estamos renovando el amor de dios por la humanidad.
⸺Tuve una experiencia yendo a rezar donde mis vecinos porque celebraban la Novena de la Virgen del Carmen, mi madrina de confirmación era tan devota de la virgen del Carmen. Ayer recordé, hoy justo un día 8 Inicia la Novena de la Virgen del Carmen, he dado esta entrevista bajo la advocación de la virgen del Carmen, pero aquí estamos a los pies de la santísima virgen de Lourdes que es la misma, pero con diferentes advocaciones. Esa experiencia fue marcando mi vida porque era diariamente, fueron ocho días. Luego de llegar de mis estudios en la tarde, prepararnos para rezar la novena donde se reza el santo rosario. Otros vecinos y una tía hermana de mi mamá que también rezaban la novena e invitaba a todos sus vecinos, amigas y después el día 16 de julio es la gran fiesta final. La novena es que se reza un rosario durante nueve días, también otras oraciones: por Chile, por la patria, por todos los integrantes de una nación, para que proteja al país, para que ella proteja de todos los daños, hasta de la naturaleza, terremotos, incendios, de grandes epidemias también eso es importante, porque, esa confianza debemos tener como hijos de María Santísima. ⸺Es importante hacer oración, agradeciendo y también pidiendo que nos socorra cuando estamos mal, que nos libre de todo el peligro y ahora este mundo esta tan convulsionado, esta tan difícil, tanta violencia, nuestra misión es orar por todos aquellos que se sienten alejados del señor. Que la santísima madre nos atraiga con su ternura de madre para que puedan encontrar la paz de sus corazones, porque, esos hombres esas mujeres no tienen paz en sus corazones, su deseo es solamente encontrarla a través de la violencia, del temor, del terror que ocasionan a tantas familias, tanto dolor en el mundo, ⸺eso me enternece, me ayuda a seguir orando, que mi presencia sea orante, sea efectiva en este mundo.
⸺¿Cómo cree que ha contribuido al servicio de la casa de dios?, ⸺en primer lugar, yo siento que a través del carisma de la congregación y de las enseñanzas, exhortaciones, en conferencias que nos entregaban nuestras fundadoras: Santa María Eufrasia Pelletier que es francesa. Ella nos decía que antes de hablarle de dios a las personas había que darles una taza de leche caliente. Porque si tu tienes frio, tienes hambre, tu estas con pena o con dolor ¿qué hay que hacer primero? Consolar a la persona. Tu ni siquiera mencionar toda esta riqueza que te estoy compartiendo si no que tu presencia, aunque tu interiormente estes rezando por ella, pero tú no le puedes decir: ⸺confía que dios te ama. La persona te diría: ⸺¿cómo dios me ama? Si todo lo que estoy viviendo y pasando. A través de gestos concretos tu puedes dar a conocer a experimentar el amor de dios en la otra persona.
En la congregación siento que he sido un gran aporte. Trabajé muchos años en Residencias Juveniles para niñas en situación de riesgo. Especialmente para niñas, la joven, la mujer, familias donde hemos ayudado porque el amor de misericordia de Jesús del Buen Pastor es un amor que levanta, que dignifica a la persona, que no hunde, sino que, todo lo contrario, consuela, exhorta, invita a levantarse, a potenciarla desde sus capacidades, esa persona tiene muchos dones, talentos, muchas riquezas que poder aflorar y sacar afuera como hija, como estudiante. El área de la educación para mi ha sido fundamental. A esas jóvenes que muchas veces tenían mucho dolor al separarse de su familia, yo trataba de ser una amiga cercana, una compañera, una madre incluso, una palabra de consuelo para que ellas puedan sentir que sus vidas tienen sentido. En ese sentido acompañé a muchas jóvenes en las residencias de niñas y adolescentes en riesgo social, por supuesto con sus familias, porque la familia tu sabes es un gran soporte contenedor para los niños. Era un dolor muy grande que sentían ellas al separarse de sus familias. Estuve sirviendo a dios en estas dificultades. Años
después junto con un grupo de laicos formamos una residencia materna infantil donde acogimos muchas jóvenes embarazadas, menores, adolescentes. Ese programa lo aceptó la congregación y yo estuve trabajando durante cinco años donde estuve sirviendo en Concepción que fueron 10 años. Feliz de poder haber hecho eso, hay jóvenes y jovencitas en estos momentos que están estudiando en la Universidad que estuvieron bajo mi vocación. Por ejemplo, hay un joven de 22 años estudia Ingeniería Civil en la Universidad del Bio Bio en Concepción, otra estudia Enfermería, otra Medicina. Una se siente bien de haber sido en un momento un aporte para la madre que esta en el periodo de gestación, porque, es muy doloroso estar separada de su pareja, del papá del hijo, o, también de algún referente familiar. Cuando las mujeres quedan embarazadas y no tienen como alimentar a los hijos no tienen como hacerse cargo. Ese hogar era financiado por la Congregación con apoyo del Obispado, recuerdo muchas veces a Monseñor Tomislav Koljatic que, con su presencia, su visita era importante, todos los meses aportaba una canasta familiar. Las damas de Corda, las esposas de los carabineros de Concepción, también las damas pensionadas del Banco Estado. La presencia de ellas era un gran aporte, incluso económico. En las celebraciones a los niños, los nacimientos, en los cumpleaños de los bebés ellas estaban ahí. Fue muy muy hermosa esa experiencia.
⸺Quisiera cerrar esta entrevista, invitando a todos y todas a que confíen plenamente en la santísima virgen María, como nuestra madre, como nuestra amiga y consejera, inspiradora espiritual, nuestra líder en el mundo que cumple un rol materno, un liderazgo tan grande como es la presencia de la mujer en el mundo. Entonces quiero invitar tanto a niñas y jóvenes que quieran consagrar su vida al señor.
Me siento muy identificada con la frase que dice María: ⸺He aquí la esclava del señor, hágase en mi su palabra. Cuando el ángel la visita para pedirle el consentimiento de que ella fuera la elegida para traer la presencia de Jesús al mundo. La otra frase que me gusta mucho de María es cuando el ángel le dice: ⸺dios te salve María, dios te saluda María. Dios siempre nos esta saludando a todos y a todas nosotras desde el momento que despertamos en la mañana, en ese momento hay que darle gracias a dios que estamos vivos y vivas y en tu nombre señor nos levantamos y nos va a ir bien en todo. La tercera frase cuando dice María: ⸺hagan lo que el les diga. Entonces si confían en dios, dios nos dice: ⸺vengan a mí todos los que están cansados, agobiados que yo los aliviaré. Si acudimos donde el, el nos va a regalar su gran fuerza espiritual para poder continuar felices y dichosos en este mundo aportando la belleza de todas nuestras potencialidades, nuestros talentos al servicio de nuestra familia, de la sociedad y de la Iglesia.
